Tarta flan con chocolate y galletas (Tarta de la abuela)

  Siempre hay recuerdos detrás de esta tarta, ¿quién no ha celebrado un cumpleaños con ella?. Es una tarta con la que he crecido, y de la que nunca me canso, porque está buenísima y no debería perderse. Además, gustan tanto a grandes como a pequeños. Ésta que veis aquí fue para celebrar un cumpleaños, y es enorme como podéis ver. Es una tarta super sencilla y económica.

  Muchos cambian la cobertura, o quitan el flan, agregan un poco de licor. ..etc, pero ya eso es cuestión de gustos. Os dejo la mía:

Ingredientes:

No os pongo las cantidades, ya que esta que hice fue enorme, pero si os diré cómo la hice.

-Flan para hacer "el niño".

-Chocolate en polvo a la taza valor.

-Galletas rectangulares.

-Chocolate con leche en tableta.
-Nata líquida 35% m.g.
-Mantequilla.

Preparación:

  Cogemos un molde desmontable y lo forramos con papel de horno (base y laterales), untamos un poco de margarina al molde para que el papel quede pegado. Ponemos una tanda de de galletas en la base.

  Por otro lado hacemos el flan en un cazo, según las instrucciones y el chocolate en otro cazo según las instrucciones de la bolsa. Una vez hecho, directamente y aún en caliente, cubrimos con chocolate las galletas. Volvemos a poner galletas tapando todo el chocolate. Ahora cubrimos con flan (aún en caliente), volvemos a cubrir con otra tanda de galletas, volvemos a cubrir con chocolate. Lo hacemos rápidamente  antes que se nos cuaje el flan.

  Así hasta que terminemos con la última capa de flan, a esta última no le ponemos galletas por encima. Una vez frío metemos en el frigorífico para que cuaje muy bien.

  Para la cobertura de arriba lo que hago es lo siguiente, por cada mitad de tableta de chocolate le añado tres cucharadas de nata más una de mantequilla (para que le de brillo al chocolate). Caliento en el microondas, ligamos muy bien y con mucho cuidado volcamos en nuestra tarta una vez que esté muy fría.

  Consejo: Antes de degustarla, la meti 20 minutos en el congelador. Desmoldamos y quitamos con mucho cuidado el papel de horno por los laterales de la tarta.

  Mirad que corte más rico y jugoso se ve; no sobró nada de nada.

Receta elaborada por: Mila

Berza isleña

  Una berza es un tipo de col verde. Aquí por mi tierra, se le llama berza a  una especie de potaje de garbanzos, más alubias blancas, a los que agregamos una buena pringá y verduras. Hay muchas variedades de ellas, como suele ser, berza de coles, de cardillo, de tagarninas, y de acelgas, y apio. Ésta nos gustan más en casa, ya que es la que me enseñó mi madre, que es la berza de calabaza y judías verdes.

Ingredientes:
-500 grs de garbanzos.
-500 grs. de alubias blancas.
-250 grs. de judías verdes planas o redondas.
-Un buen trozo de calabaza.
-3 o 4 patatas bien grandes.
-Un buen trozo de papada o magro de cerdo.
-Un buen trozo de chorizo, si es de jabugo, mejor.
-Un buen trozo de morcilla.
-Un poco de comino molido.
-Una cabeza entera de ajos.
-Un poco de sal.
-Un poco de pimentón dulce.
-Un poco de avecrem.
-Aceite de oliva virgen extra.

Preparación:

  La noche anterior ponemos en remojo los garbanzos y las alubias blancas, en agua muy fría. Durante 12 horas. Una vez que haya pasado las horas de remojo de las legumbres, los escurrimos muy bien y lo echamos en una olla express. Echaremos todos los ingredientes en crudo, lavándolo cada uno de ellos, las judías, hay que quitarles el rabito y las cortaremos del tamaño que queramos, la calabaza, la pelamos y lo cortamos en tamaño que queramos, las patatas igual. La papada la lavamos muy bien con agua muy fría y la echamos entera, el chorizo exactamente igual, y la morcilla la pincharemos un poco, para que cuando se haga en la olla, no se reviente al hacerse, la cabeza de ajos la pelamos y la lavamos y ya el resto de ingredientes. A todo esto lo cubrimos con agua, que sobrepase, como unos dos o tres dedos. Removemos el conjunto y tapamos la olla muy bien y le pondremos el pito o la válvula del vapor, lo acercamos al fuego y cuando comience a girar la válvula, esperamos 20 minutos.

  Una vez que haya pasado los 20 minutos, apagamos el fuego y quitamos la válvula con mucho cuidado y esperamos que se vaya todo el vapor. Cuando se haya ido todo el vapor, abrimos la tapadera con mucho cuidado, y removemos bien. Como en todos los potajes o guisos, está más bueno de un día para otro, porque así se adhiere los sabores unos con otros. Nos sacamos un buen plato de este guiso, y aparte nos sacamos la pringa, como segundo plato, que con un buen trozo de pan y un buen vino, está ¡¡exquisito!!.

  La pringa hay personas que se las echa en el plato del guiso, pero en verdad, se va estrujando con el pan, en un plato aparte.

Receta elaborada por: Carmen.

Alcachofas guisás con papas

  En Cádiz, es típico hacer este plato cuando llega el invierno. Es un guiso que se hace con ingredientes de la huerta y sobre todo frescos, ya que potencia mucho el sabor. Cuando es temporada de alcachofas, habas y guisantes (chícharos, como lo llamamos por aquí) es habitual hacer este guiso contundente en nuestras casas.
  De antaño ya lo hacían nuestras abuelas, recuerdo que nuestra abuela paterna Nina lo preparaba. Según sus hermanas lo bordaba y aunque empleaban los mismos ingredientes y la manera de hacerlo, a ella le salía mejor y mucho más rico. Quizás es que ella le pondría todo el cariño, la sencillez y  la bondad que sólo ella tenía y que nuestro padre heredó. Aún después de tantos años que ya no está con nosotros pienso en lo que aportó a mi vida cada día. El cariño por sus nietos y la sensibilidad que ella tenía, aún la recuerdo con cariño, para mí era realmente especial. De ella heredé su nombre, y me hace recordar que a pesar de las adversidades de la vida, hay que salir adelante con lo que se tiene y hacer felices a los demás. Como ella lo hacía, nunca tenía nada para ella, es más lo daba todo y era ella la que lo necesitaba. Pero daba lo que tenía su amor. Se nos fue muy pronto y muy joven, y la recordamos todos con cariño.

Ingredientes para 4 personas:

- 8 alcachofas redondas frescas.

- 1/2 kilo de guisantes frescos.

- 1/2 kilo de habas tiernas frescas.

- 2 cebolletas moradas.

- Perejil fresco.

- 1 kilo de patatas nuevas.

- 6 cucharadas de pan rallado ajo y perejil.

- Sal.

- Pimienta negra molida.

- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.

- Agua.

- Cuatro rodajas de limón (para que no oscurezcan las alcachofas).

Preparación:

  Quitamos el tallo a las alcachofas, desechamos las hojas exteriores y cortamos un poco su extremo. La pondremos en agua con las rodajas de limón para que no ennegrezcan mientras limpiamos las restantes.
  En un plato hondo, ponemos el pan rallado, un poco de sal, la pimienta, el perejil fresco picado y las dos cebolletas cortadas en rodajas muy finas. Mezclamos todo el preparado y con la ayuda de una cuchara iremos rellenando un poco la alcachofa por dentro. No os preocupéis en rellenarlas perfectamente porque mientras se guisan se sale un poco el relleno, y esto servirá para espesar el guiso.
  Una vez rellenas reservamos el preparado que pueda haber sobrado si hubiera. En una cazuela, agregamos los guisantes, las habas y las patatas peladas y chascadas. Introducimos las alcachofas, una rama de perejil, el aceite, esparcimos el preparado sobrado anteriormente y salamos el conjunto. Vertemos el agua sólo hasta cubrirlas y las ponemos al fuego moderado, hasta que estén tiernas al pincharlas con un tenedor unos 30 minutos aproximadamente.
  Vigilad que no espese demasiado y se agarre al fondo de la cazuela, si fuese necesario agregamos un poco más de  agua durante su cocción.

Receta realizada por: nuestra madre.
Escrita por: Nina.

Tarta de calabaza americana (Pumpkin Pie) con frosting de queso

  Cuando M.Luz del blog: Trasteando en mi cocina la desafiadora de este mes nos mandó el día 1 qué receta teníamos que hacer para el grupo Desafío en la Cocina (el décimo ya), nos quedamos un poco ¡¡¡ploff!!!, ninguna de nosotras habíamos utilizado la calabaza en un dulce. 

  Lo primero que pensamos fue: "¿eso estará bueno?". Pues a todos los que nos siguen, os puedo asegurar que sí, es más la tarta esta vez la probamos las tres, y pensamos lo mismo. Así que os la recomendamos sin ninguna duda, el sabor a especias hace de esta tarta que sea única.

  Es una tarta que según he leido por la web no puede faltar en las comidas del día de Acción de gracia, que se celebra hoy en día;  el cuarto Jueves del mes de Noviembre. Es una celebración familiar que no va unida a ninguna religión, y las familias hacen lo imposible para reunirse, e incluso aunque estén en otros estados viajan para estar juntos. 

Ingredientes para un molde de 28 cm:

-Una base redonda de masa quebrada.

-500 grs. de calabaza sin la piel

-200 ml. de nata para montar 35% m.g.

-90 grs. de azúcar moreno.

-50 grs. de azúcar.

-2 huevos frescos más una yema.

-2,5 grs. de sal fina.

Especias: 

-10 grs. de canela.

-5 grs. de jengibre molido.

-1 grs. de nuez moscada molida.

- 1 grs. de clavo molido.

-1 grs. de carcadomo molido.

-2,5 grs. de ralladura de limón.

Para el frosting de queso (cobertura):

-200 de nata para montar 35% m.g.

-200 gr. de queso de untar.

-100 gr. de azúcar glass.

-1 cucharadita de maizena.

Decoración:

-Pipas de calabaza peladas.

Preparación:

  Se hace la calabaza al vapor, para que no pierda sus propiedades, vamos pinchando hasta que veamos que queda tierna. Reservamos y dejamos enfriar.  

 Colocamos en el molde la masa quebrada sin quitarle el papel, la pinchamos por todas partes. Reservamos en el frigorífico. En un bol añadimos todos los ingredientes (menos la cobertura, claro, pero lo digo por si hay algún despistado/a por aquí). Batimos todo muy bien, junto con la calabaza que habíamos reservado. El relleno resultante queda muy líquido (no asustarse, que luego cuaja).

  Este relleno lo volcamos sobre el molde con la masa quebrada que teníamos reservada, repartiéndolo muy bien por todos lados. Horneamos a 220º calor arriba y abajo durante 15 minutos. Pasado este tiempo bajamos la temperatura del horno a 175º y horneamos otros 30-40 depende de cada horno) minutos más o menos. 

  Importante: si se ve que la parte de arriba de la masa quebrada se está quemando, colocamos un trozo de papel de aluminio sobre ella, sin apretar la tarta, que quede suelto, yo lo tuve que colocar. Estará hecho cuando comprobemos que en el centro de la tarta al pincharla con un palillo de dientes, éste sale limpio. Quedará como la foto que se ve abajo a la derecha, que no tiene todavía el frosting de queso.

  Dejamos enfriar  y guardamos en el frigorífico hasta el día siguiente (os lo aconsejo, está mucho más rico de sabor).

  Al día siguiente preparamos el frosting de queso: montamos la nata con varillas. A modo de consejo; la nata y el bol de cristal tienen que estar super frios, para que se pueda montar mucho mejor. Reservamos en el frigorífico. 

  Por otro lado en otro bol, batimos el queso, la maizena y el azúcar glass, hasta que quede todo bien ligado. Añadimos a la nata montada (ver foto de arriba), con movimientos envolventes. Metemos el frosting de queso en una manga pastelera y decoramos al gusto, yo hice líneas de arriba hacia abajo, y puse montocitos pequeños alrededor. Decoramos con pipas de calabaza y listo.

  Si quieres ver todas las propuestas del grupo sólo tenéis que pinchar aquí y le llevará a las recetas de nuestros compañeros.

  Si quieres unirte a este grupo tan sólo tienes que ponerte en contacto con algunas de las desafiadoras:

Carolina: de Tomillo, laurel y otras cosas de comer, Mabel: de A nadie le amarga un dulce, M. Luz: de Trasteando en mi cocina Rocío: de Chismes y cacharros. o con nosotras: Carmen, Mila y Nina de La cocina de Camilni.

  Tan solo deciros que el próximo desafío viene de la mano de nuestra desafiadora Rocío del blog: Chismes y cacharros.. ¿Qué será?... Pues no lo sabemos, lo que sí es que es un desafío dulce. Asi que, a esperar hasta el 20 de Marzo, donde tendremos otra nueva cita.

Para saber más del origen de esta tarta pincha aquí.
Fuente del relleno, con variaciones en las cantidades: Recetas americanas.
Receta elaborada por: Mila.

Brioche de arándanos

  Ahora con el frío es cuando más me apetece encender el horno y hacer  recetas pendientes que tenía ya ganas de probar. Esta es una de ellas. Para nada complicada y divertida para hacer con los peques de la casa, ya que eso de meter la mano en la masa y luego ver como crece les encanta, por lo menos a mis hijos.
  Un brioche es ni más ni menos que un pan dulce y tierno de origen francés. La receta la vi en  Cuchillito y tenedor,  sabía que me iba a gustar desde el primer momento que lo vi; y así fue; os lo recomiendo.

INGREDIENTES:

-275 grs. de harina.

-25 grs. de levadura fresca (un cubito).

-100 ml. de leche templada.

-1 huevo.

-25 grs. de mantequilla a temperatura ambiente.

-50 grs. de azúcar.

-40 grs. de arándanos deshidratados.

-Un pellizco de sal.

-Huevo batido y mantequilla para pincelar.

PREPARACIÓN:

1.- En un bol mezclamos la harina con el azúcar y la sal.  En la leche templada disolvemos muy bien la levadura y lo agregamos al bol. Mezclamos todo hasta que quede una mezcla homogénea.

2.- Añadimos a continuación, el huevo batido y la mantequilla. Volvemos a mezclar hasta conseguir una bola de masa muy lisa y elástica. Agregamos los arándanos (sin hidratar) y volvemos amasar para que los frutos se repartan por toda la masa.

3.- En el mismo bol cubrimos la masa y dejamos levar durante 45 minutos. Doblará su tamaño.

4.- Pasado ese tiempo dividimos la masa en 6 partes iguales. Cada parte la estiraremos con la ayuda de un rodillo y la envolvemos sobre sí misma, formando un rollito. Colocamos en un molde redondo forrado con papel vegetal. El primer rollo lo colocamos en el centro y los demás alrededor bien juntitos, formando como una flor.

5.- Pincelamos con la mantequilla y el huevo batido y dejamos levar de nuevo durante otros 45 minutos, tapado. Doblará de nuevo su tamaño.

6.- Una vez pasado el tiempo de levado introducimos en el horno precalentado a 180º, hasta que se vea doradito. Una vez hecho dejamos enfriar sobre una rejilla.

Nota: Desde mi punto de vista, hay que comerlo en el mismo día. De un día para otro se endurece un poquito, debido a la levadura fresca que lleva.

Receta elaborada por: Mila.

Patatas dauphinoise

  Me encontré con este plato por casualidad, una noche que no sabia qué hacer de cenar. Quería algo que fuera económico y con lo que tenia en casa. Vi los ingredientes que llevaba, y como en casa siempre tengo estos lácteos, por aquí les encanta la pasta y le suelo echar los mismos ingredientes, que lleva estas patata; y me dije: "debe de estar delicioso". Así que, me puse a hacerlo, le gustó mucho a mi familia y más a los niños, al llevar queso.

  Es un plato de patatas gratinadas, típico de la cocina francesa y de origen delfinés, en los Alpes franceses. Las patatas cortadas en finas rodajas se cocinan en el horno con nata fresca o leche, o la mezcla de ambos.

  Estas patatas es para acompañar a algún plato de carnes o comerlas tal cual, recién hechas, ya que de un día para otro absorbe las patatas los lácteos y se quedan muy secas, hay personas que las hacen bastante gratinadas y que absorban todo el lácteo, pero yo lo quise dejar con un poco de ella, para que estuviera más jugosas al comerlas. No me enrollo más y vamos con la receta.

Ingredientes:

-25 grs. de mantequilla.

-2 dientes de ajos.

-Una cebolla picada, 

-Un kilo de patatas.

-200 ml. de nata liquida especial para cocinar.

-200 ml. de leche entera.

-100 grs. de queso emmental rallado.

-100 grs. de queso mozarella rallado.

-Un poquito de sal.

-Un poquito de pimienta negra recién molida.

Preparación:

  Lavamos las patatas con su piel y luego procederemos a pelarlas, las lavamos otra vez, y las cortaremos muy finitas, yo utilice un cortafiambre, que viene con medidas, para cortar el espesor que queramos.

  En una sartén al fuego, se ponen la mantequilla, los ajos picados y la cebolla bien picada. y vamos rehogándolo a poquito a poco. Cuando veamos que haya cogido un poco de color, echaremos la nata y la leche y seguimos calentando, a fuego bajo, ¡¡Muy importante!! sin que llegue a hervir, porque sino se evaporará la nata, y se queda con grumos y se estropea la crema, siempre removiendo de vez en cuando. 

  Cuando esté bastante caliente, echaremos las patatas y vamos removiendo con mucho cuidado. Se dejan entre 10 ó 12 minutos, en la sartén, que se vayan rehogando, calentándose siempre a fuego bajo.

  Cuando veamos que las patatas empiezan a deshacerse, mientras las estamos removiendo, ya es el momento de apartar la sartén del fuego. Les echamos un poquito de sal y pimienta negra molida. Les damos un par de vueltas, cuidando que no se rompan y las pondremos en un recipiente apto para el horno.                                                             

  Les echamos el queso mozarella bien distribuido y el queso emmental y lo meteremos en horno precalentado a 180ºC, calor arriba y abajo. Cuando las patatas se hagan un poco, y cojan un poco de color, lo pondremos a gratinar con turbo ventilador, unos 3 minutos y ya nos quedaría el queso fundido.

     Si os gusta más gratinado, que se haga una costra por arriba, mejor que mejor, estará más bueno. Como he dicho anteriormente, es para una guarnición de cualquier plato, pero si es de carne, mejor. Probadlo, ¡¡está buenísimo y a los peques de la casa, les encantará!!

OTRA FORMA DE HACERLO MAS RÁPIDA:

  Cortamos las papas con el mismo grosor. Frotamos un molde o una fuente apta para el horno, con los dos dientes de ajos, luego lo enmantecamos bien. Disponemos en la fuente, una capa de patatas, salpimentamos, cubrimos con el queso y agregamos algunas cucharadas de nata. Distribuimos trocitos de mantequilla y repetimos el procedimiento, hasta terminar con todas las patatas.

  Precalentamos el horno a 200ºC, cuando el horno esté precalentado, meteremos la fuente, con calor arriba y abajo, unos 35 minutos, cuando haya pasado los 35 minutos, lo pondremos a gratinar con turbo ventilador, unos 3 minutos, hasta que veamos que el queso empieza a burbujear, es el momento de sacarlos. 

     Servimos bien caliente.

  El gratinado queda crocante en el exterior, pero bien tierno por dentro.

Nota: Hay que conservar el almidón de las patatas, una vez que estén peladas y lavadas.

Receta elaborada por: Carmen

Fuente: EnCasaContigo

Crema de coliflor y brócoli

  Bien es sabido que incorporar verduras a nuestra dieta es de lo más sano, no sólo por su alto poder de vitaminas y antioxidantes, son fáciles de asimilar para nuestro organismo y es una buena aliada para dietas de adelgazamiento. No es necesario que estemos a dieta toda nuestra vida para perder algunos kilos de más, si seguimos unas pautas de alimentación sanas incorporando fruta, verdura y menos grasas seguro que nuestro cuerpo lo agradece y perderemos esos kilitos que nos sobra. Personalmente me gusta mucho preparar cremas de verduras. Para la cena suelo hacer cremas de todo tipo de verduras, y hoy le ha tocado a dos verduras que son muy parecidas: la coliflor y el brócoli. Es ideal para tomar en invierno y para acompañarla podemos añadirle algún ramito de  la verdura ya cocidas, o un poco de aceite o sésamo.

Ingredientes:

- 1 puerro.

- 1/2 cebolla.

- 2 dientes de ajos.

- 400 gramos de coliflor.

- 200 gramos de brócoli.

- 600 ml de agua.

- 2 pastillas de caldo o sal.

- Aceite de oliva virgen extra.

- Pimienta blanca molida.

- 2 quesitos en porciones light.

Preparación:

  Separamos los ramos de la coliflor y el brócoli, lavamos bien con agua y reservamos. Mientras tanto cubrimos el fondo de una cazuela con aceite, limpiamos el puerro, los ajos, la cebolla y cortamos en rodajas finas. Cuando el aceite humee, añadimos el puerro,los ajos y la cebolla, lo pochamos hasta que esté dorado. A continuación, añadimos los ramos de la verdura y rehogamos el conjunto, añadimos las pastillas de caldo o sal y la pimienta blanca. Cubrimos con el agua y dejamos a fuego unos 20 minutos tapado, vigilando que no se consuma todo el agua. Una vez tiernas las verduras, apartamos del fuego y dejamos que temple un poco. Si queremos una crema más espesa podemos quitar el agua con la ayuda de un cazo, añadimos los quesitos y batimos con una batidora, hasta que quede la mezcla homogénea. Servimos acompañada de ramilletes de la verdura o con un chorrito de aceite de oliva.

Receta elaborada por: Nina.

Menudo de nuestra madre (Callos de Cádiz).

Un plato de cuchara que a mi personalmente me encanta y disfruto de él, como un niño con un juguete nuevo. Se que hay muchas personas que este tipo de plato no le gusta, por el mero hecho de que está hecho con callos....ufff si lo probaran, cambiarían de opinión, porque es uno de los platos más ricos que se puede comer cuando hace frío. Aunque a decir verdad, en verano también lo como.

 Es típico andar por los bares de Cádiz y por sus pueblos y ciudades, y encontrarte con una tapita de menudo, como se dice por aquí.

  Este plato lo ha elaborado nuestra madre, siempre que lo hace, alli voy con el taper a que me eche, y sino me lo trae mi padre; y siempre le digo: "Ooooh mami que poco me has "echao" chiquilla", y ella siempre me contesta: "Ainsss Mila si te he "echao" para dos platos, y tengo que darle a tus hermanas". ¿Y si cuela?...je..je..je.  Es que no hay nadie que lo guise como ella, para chuparse los dedos.Os dejo cómo lo hace.

Ingredientes:

-1 kilo de callos frescos.

-1 kilo de garbanzos remojados de la noche anterior (al menos 12 horas).

-Un chorizo (cortamos a rodajitas, y por la mitad)

-Trozo de jamón serrano (cortamos a taquitos pequeños).

-Una cebolla grande.

-Una cabeza de ajos sin pelar.

-3 a 4 dientes de ajos pelados.
-Pimentón molido dulce.

-Sal.
-200 ml. de aceite de oliva virgen extra.

-Un manojo de hierbabuena bien fresca.

-Medio bote de especias reunidas para menudo en granos (la venden ya preparada).

Para limpiar los callos: vinagre y sal.

Preparación:

  Para que salga bien rico el menudo, debemos lavar muy bien los callos. Cortamos los callos a trocitos y  los limpiaremos muy bien con sal y vinagre; enjuagamos y volvemos a limpiar de nuevo con sal y vinagre.  Enjuagaremos varias veces hasta que el agua quede clara y el olor a vinagre haya desaparecido.

  En la olla a presión metemos los callos cubriéndolos de agua, metemos la cebolla zanjada y la cabeza de ajo (sin pelar), sal al gusto. Cerramos la olla, una vez que pite, contamos 30 minutos. Pasado el tiempo retiramos y abrimos.

  A continuación, agregamos a la olla con los callos: los garbanzos, el aceite, el chorizo, el jamón, el pimiento molido (añadimos hasta que veamos "coloraito"), y del manojo de hierbabuena añadimos unas ramitas con las hojas. Por otro lado, batimos las hojas de hierbabuena que nos han sobrado del manojo junto con los dientes de ajos pelados y un pellizco de sal junto con un poco de caldo de los callos. Añadimos a la olla.

  Las especias reunidas (quitamos las guindillas que trae) la picamos en la picadora, y la colocamos en gasas esterilizadas cerrándolas como si fuera una bolsita con un trocito de la misma gasa. Añadimos nuestra bolsita de especia, y dos guindillas. Cerramos de nuevo la olla a presión y cuando pite dejaremos al fuego otros 40 minutos.

  Servimos calentito y a disfrutar. De un día para otro está mucho más rico, aunque la verdad yo el mismo día ya me lo estoy comiendo....es que no me puedo aguantar.

Nota: Las especias reunidas traen guindilla, cada uno añada según guste. Lo normal es que no pique mucho. Cuando se enfría este guiso, suele quedarse cuajado, no preocuparse porque al calentarse vuelve a quedarse igual que cuando lo hicimos.

Receta por: Mila.

Elaborada por: Nuestra madre.

Bizcocho de queso y limón.

  En casa gustan mucho los bizcochos y si tienen toques cítricos mucho más. Quería hacer un bizcocho diferente de limón, y cuando vi éste en la cocina de Amalia, del blog: Cuadernos de cocina me animé hacerlo al día siguiente, es que llevaba queso y llevaba limón: tenía que probarlo. No me lo podía perder. Así que, dicho y hecho. La verdad es que Amalia tenías razón hija mía, es un bizcocho suave y para nada empalagoso. 

  Si eres de los que te gustan los bizcochos, este es el tuyo, te encantará. Tiene un punto de humedad en su punto, y al morderlo se te deshace en la boca. Ya lo he elaborado como una decena de veces, y es que ahora en mi casa sólo quieren que le prepare éste, sobre todo mi marido; que dice que es su preferido.

Ingredientes:

-La ralladura de un limón.

-1 sobre de levadura.

-330 g. de azúcar extrafina.

-250 g. de harina.

A temperatura ambiente:

-185 g. de queso crema natural .

-185 g de mantequilla.

-3 huevos.

Decoración:

-Chocolate blanco y chocolate negro.

-Azúcar glass.

Preparación:

  Para un molde corona de 20 cm.

  Con las varillas eléctricas batimos la mantequilla, junto con el queso y la ralladura del limón, hasta que la mezcla adquiera un color clarito. Añadimos sin dejar de batir el azúcar poco a poco, obtendremos una mezcla muy ligera y esponjosa. Añadimos los huevos de uno a uno hasta que quede todo bien incorporado. Es el momento de incorporar la harina y el sobre de levadura, lo haremos poco a poco y a velocidad baja, lo justo para que la harina se mezcle con los demás ingredientes.

  Precalentamos el horno a 190º, engrasamos nuestro molde y vertemos en él la masa. Horneamos durante 1 hora calor arriba y abajo (con ventilador sería 45 minutos). Si se ve que la parte de arriba empieza a dorarse antes de la cuenta podemos cubrirlo con papel de aluminio (lo puse a media cocción, se me horneó también antes). El horneado depende de cada horno, yo lo tuve que poner otros 4 minutos más, porque al pincharlo con un palillo de dientes me salía todavía masa pegada en él.
  Una vez enfriado totalmente, decoramos en mi caso, con chocolate blanco y negro y espolvoreamos azúcar glass por encima.

Consejos: No se debe de abrir el horno cuando se está haciendo un bizcocho, la temperatura al abrir cambia, si es necesario abrirlo porque se nos quema un poco la parte de arriba, lo haremos a mitad de cocción. Los ingredientes deben de estar a temperatura ambiente, incluso los huevos. Seguir siempre el orden de batir los ingredientes, no todos de una vez, el resultado cambia, hay que seguir las recetas tal cual es.

Receta elaborada por: Mila.