Chocos en su tinta

     Esta forma de hacer los chocos, siempre nos trae recuerdos de nuestra infancia. La que liábamos, y es que para nosotros era divertido ver nuestros dientes blancos convertidos en un color negro.

     Allí nos tenían nuestros padres en la mesa viéndonos como nos enseñabamos los dientes unos a otros, para ver quien los tenía más negros...jajjajaja, nos partíamos de la risa. Incluso salíamos corriendo al espejo para vernos. Lo pasabamos bomba (bueno aún lo pasamos cuando nos reunimos juntos) y ahora nuestros hijos lo hacen también.

     Esta receta se la dedicamos a nuestros queridos padres, a los cuales queremos mucho. Gracias papá y mamá por luchar por todos nosotros, y por estar siempre ahí cuando cada uno de vuestros hijos os necesita. Gracias por tantos recuerdos buenos.

Ingredientes:
Para 2 personas:
 -2 chocos o sepias
 -4 dientes de ajos
 -aceite de oliva virgen extra
-sal, una hoja de laurel y vino blanco.
Preparación:

     Esta receta no tiene mucha complicación, se hace rápida y  también como decimos por aquí "que se hace sola".

     Enjuagamos muy bien los chocos bajo el grifo de agua fría. No le quitamos el hueso que trae blanco (se parece a una tabla de surf) ya que lo que intentamos es no perder la bolsita de tinta que trae. Lo ponemos en una cacerola y agregamos sal.

     En una sartén  con aceite de oliva freimos los ajos en laminas y cuado estén doraditos (no quemados) echamos la hoja  de laurel.

     Se lo echamos a los chocos con un buen chorro de vino blanco (al gusto). Lo  pondremos a fuego medio con un poco de agua. La cual la añadiremos poco a poco según vaya necesitando. Veremos que los chocos con la cocción su bolsita se romperá y dará el aspecto negro que se vé en la foto y que con la cocción se desprende su hueso. Cocinaremos hasta que pinchemos que el choco esté tierno.

     Esperamos que os guste este plato típico gaditano, a nosotras nos encanta. Eso sí si lo coméis fuera, llevar un cepillo de dientes.

Receta por: Mila.
Elaborada por nuestra madre.