El otro día nuestro queridísimo padre, nos trajo hierbabuena, también conocida como menta verde. Un olor que traían, y ese verde precioso, ¡¡¡ vamos que parecía un ramo !!!.
La hierbabuena, nos viene muy bien para el caldito del puchero, para los "majaos" del potaje...
Un truco que tenemos para tener siempre a mano esta hierba es congelándola. ¿Cómo? Pues ahí va:
Enjuagamos bajo el chorro de agua fría. Dejamos secar. Iremos cortado con las manos las hojas (tienen que estar bien secas) y las pondremos en un recipiente que podamos meter en el congelador. No apretar las hojas unas con otras, tienen que estar sueltas.
Muchísimas gracias mi niña por pasarte por mi blog y quedarte en el,decirte que me encanta la menta y que tengo sembrada,yo la utilizo mucho pero no sabía como congelarla.
ResponderEliminarAhora lo pienso hacer,gracias por el consejo.
Un beso enorme cielo.
Feliz día.
Ague, cuando lo hagas te sorprenderá.Quedan enteras. Lo que sí que tienes que tener cuidado es de no apretarlas unas con otras para que no se peguen y el tuper tiene que ser grande para que queden sueltas. En una bolsa de congelación se romperían.
ResponderEliminar