Tiramisú

   El tiramisú es un postre italiano muy popular que se toma frío y con cuchara. Es curioso pero no existe una receta única para hacerlo, sino multitud de variantes, a partir de una serie de ingredientes en el que no puede faltar el café y el cacao.. ¿quién no lo ha probado? ¿quién no lo ha hecho? En cuestiones de hacer tiramisú, cada uno lo hace diferente, hasta el molde que emplean: unos en tartas, unos en porciones, otros en vasitos...etc..  En esta ocasión utilicé unos cuencos muy monos que me regaló mi mami.

  Esta es mi forma de hacerlo, no lo teníamos en nuestro recetario y como me chifla hacer postre y no tanto comerlos, éste os aseguro que me lo comí entero y bien rebañado con la cucharilla, vamos que el cuenco lo dejé limpio.

Ingredientes:

Para tres cuencos como se ve en la foto, pero he de decir que cada cuenco sería para dos personas.

     -250 grs. de queso mascarpone.

     -2 huevos.

     -2 cucharadas de azúcar.

     -bizcochos largos (melindros) los que se necesiten.

     -1 taza grande de café.

     -cacao en polvo.

     -50 ml. de licor (el que más os guste, o el que tengáis en casa).

Preparación:

1.- Hacemos el café y reservamos para que vaya enfriándose.

2.- Separar las claras de las yemas. Montamos las claras con un pellizco de sal y reservamos en el frigorífico.

3.- Montamos las yemas con el azúcar (no sube mucho). A continuación le añadimos el queso mascarpone, vamos batiendo manualmente con movimientos envolventes hasta conseguir una mezcla homogénea y suave.

4.- Añadimos a esta mezcla las claras montadas que habíamos reservado en el frigorífico, con movimientos envolventes de abajo hacia arriba con mucho cuidado para que no baje y se quede líquido.  Ya hecha la crema reservamos en el frigorífico.

5.- En un recipiente echamos el café junto con el licor y vamos mojando rápidamente cada melindro uno por uno y escurriéndolos muy bien. Colocamos en el fondo del cuenco (la cantidad que cada uno guste), añadimos un poco de crema, volvemos a colocar melindros escurridos en café, volvemos a echar crema..etc. 

    Esta operación la repetimos hasta llenar los cuencos, teniendo en cuenta que tenemos que terminar con una capa de crema.

6.- Una vez acabado espolvoreamos con cacao en polvo, la cantidad depende del gusto de cada uno. Personalmente me gusta con una capa muy fina, para saborear bien la crema.

7.- Introducimos en el frigorífico y servir muy frío. Mejor de un día para otro, el sabor se intensifica.

     Nota: Si lo que queréis es hacer una tarta, hay que multiplicar según los comensales y dependería también de la cantidad que come cada uno. Nosotros nos lo comimos para postre del almuerzo, es un postre que  llena pero a la vez goloso, no puedes parar....ainssss.

Receta elaborada por: Mila.